Los dos propósitos principales de la meditación son restablecer la experiencia directa y la consciencia del yo como espíritu, y recrear el vínculo sutil con la Fuente espiritual. Mediante un proceso gradual de autorrealización y una reconexión con lo Supremo, se produce el conocimiento y la transformación del yo.
La meditación nos permite llevar nuestra consciencia nuevamente a su forma verdadera, natural y original, de paz, fuerza y amor. Es el arte de cultivar la autoconsciencia de manera que aumentan nuestros recursos internos. Va abriendo el baúl de los tesoros del subconsciente y permite tener acceso a mi propio corazón, al núcleo de mi consciencia, donde mi propia sabiduría se encuentra en su plenitud.
Deberíamos volver nuestra atención y consciencia hacia dentro, donde hallaremos que la paz, el bienestar y el poder que buscamos han estado presentes todo el tiempo. La meditación restablece la consciencia de nuestra paz innata y poder espiritual internos, reconectándonos con estos estados del ser y permitiéndonos incluirlos en nuestra personalidad y, mediante nuestros actos, en el mundo.
Extractos del libro:
A LA LUZ DE LA MEDITACIÓN
Una guía para meditar y alcanzar el desarrollo espiritual
Ed. KIER
Mike George
Comentarios. 1
Disferenciando lo que es interno y lo que es externo a nuestro " yo real ", estamos dando el primer paso para visualizar nuestra auténtica vida, o lo que es lo mismo, "nuestra experiencia vital" en este plano material. Realmente es un paso diminuto en nuestra actitud ante el entorno; pero cuando se consigue desarticular nuestra mente, comprendiendo esta dualidad, nuestra forma de experimentar el mundo que nos rodea cambia de forma enorme y sustancial. Dándonos un entendimiento superior sobre las vicisitudes físicas y temporales.